miércoles, 5 de enero de 2011


Paso el tiempo cogiendo trenes que no sé donde van, de noche se me olvida si te veo en el bar. Siempre me toca perder, pero ya sé llorar. Una botella, algo que liar y una canción, en noches como esta me vuelven a recordar que a tu lado todo acaba mal. Viviendo a tu alrededor, siempre atrapado a una canción, viviendo a tu alrededor, siempre hay que estar diciendo adiós. Maldita noche, creo que ya he bebido de más, vuelvo a ver tus ojos al otro lado del bar, se esconden, tras un vaso de cristal, al final beso frío en el portal. Ahora dices que te vas, que olvide lo de anoche, que el tren se va. Ahora se que quererte fue el error, perderte el castigo y tu beso el adiós. Déjalo no es hora de llorar, pasarán las horas del reloj y al final cartas en el cajón, invierno en la ciudad, lluvia en mi corazón.

3 comentarios:

  1. Ese maldito adiós que tanto duele.

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  2. He ido a verles!
    (y he omitido el detalle de "eres una mocosa, me has pringaaaado"...)

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  3. Quizás el problema sea que te preocupas por el destino, cuando lo que de verdad importa es el trayecto, el trayecto y la companía, no? :3

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